Atrapando al primo pequeño escondido al aire libre. Los dos estaban en la granja y empezaron a mirarse. Se les acaba ocurriendo la idea de tener sexo a escondidas en la mano. Así que van a un lugar más apartado. Cuando llegan, el pervertido pone a la putilla de culo y empieza a penetrarle el coño. A la niña traviesa le gusta mucho y le pide a su primo que le meta más.